Un detalle importante es que los hechos y actos que ocurrieron en nuestra vida no se olvidan con el tiempo, simplemente quedan relegados cuando ya no es esencial en nuestra vida, por eso "no los recordamos", un ejemplo de ello son los recuerdos de infancia.
Pero, si dicho recuerdo tiene carga emocional como dolor o vergüenza, definitivamente cualquier evento similar al de la experiencia inicial, puede desencadenar nuevamente esas emociones, pero también esos hechos con carga nos condicionan en nuestro actuar futuro, es decir nuestra conducta. La idea es aprender a recordar sin dolor, sino esa carga nos afecta en nuestra vida actual a veces en formas insospechadas.
Una manera de controlarlos es evitar que imponga o controle nuestra emociones, reconociendo que no es analítico, sino reactivo o instintivo.
Conocernos a nosotros mismos, no sólo es conocer nuestros defectos y virtudes, sino sobre todo mantener el equilibrio en nuestras vidas.
Les recomiendo la lectura publicada en nuestro blog, "Las mentes de la mente humana" para que tengan mayor referencia de la mente reactiva y sus efectos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario